Ya conocen la historia, viejito amargado con corazón de oro, pero bien hecha.
Esta fue la ultima película que vi en el 2014. Quería verla antes de irme por que ir al cine seguido y escribir de eso me gusta mucho, pero se me desarrollo la obsesión de ver las películas el día de su estreno, si no estoy ansiosa hasta que las veo. Como este fue un preestreno, me toco pagar por verla en VIP, pero estuvo bien.
La historia es acerca de un viejito llamado Vincent, que es mu alcoholico y parece que odia al mundo. La única compañía constante que tiene es una prostituta que esta embarazada y necesita ahorrar para su hijo. Un día, a la casa de al lado se muda una señora y su hijo y el termina siendo el niñero del niño, con quien desarrolla una amistad.
La película es tan predecible como puedan imaginarla, donde descubrimos que Vincent es amargado por una razón y aunque medio a fuerzas, le acaba agarrando cariño al niño y viceversa . Tiene unos cuantos detalles que de pronto llevan a la historia por donde no esperabas pero no es que sean cambios mayores, el final lo ves venir y no hay nada sorprendente.
Dicho esto, la película no es mala, el niño es preciosos y lo quieres y Bill Murray,a pesar de lo antisocial que es, da mas risa que molestia (lo cual es totalmente la intencional). Naomi Watts también es muy divertida y Melissa McCarthy completa bien el reparto. Igualmente, los padres católicos se salen un poco de lo esperado.
No descubrirán el nuevo hit de la cinematografía con esta película ni la historia hará girar su mentes, pero es una linda película, entretenida y un poquito conmovedora.
...Y en notas banales
La escena donde Oliver llega a su escuela católica, donde dice que cree que es judío y la respuestas consecuentes fue la escena que mas me gusto de la película. De hecho, el niño, que se llama Jaeden Lieberher, es tan precioso que amé todas las escenas con el.
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